Debemos enfrentar el presente y el futuro aún sabiendo que hemos perdido cosas importantes en nuestras vidas.
La Biblia dice en Eclesistés 7:10-No digas: ¿Por qué fueron los días pasados mejores que estos? Pues no es sabio que preguntes sobre esto. Nunca te preguntes por qué todo tiempo pasado fue mejor, pues ésa no es una pregunta inteligente.(DHH).
Elegimos el pasado porque aunque nos fue mal, sabemos como salimos de esas situaciones. El interrogante de muchos no es como enfrentarse al problema si no como hemos de salir de este, por eso, muchos siguen estancados en el tiempo, detenidos en una circunstancia de sus vidas, no perdonan ni piden perdón, no enfrentan desafíos en sus vidas por el temor a lo desconocido y siempre resulta fácil acusar a Dios de nuestros desaciertos.
Pero la buena noticia es que debes luchar por el presente, el ahora, entender que este es el tiempo que El Señor a preparado, aunque parezca escabroso y difícil de enfrentar, Dios nos invita a desarrollar nuestra fe en El.
Debemos aprender a hacer algo aun con la nada que nos queda, una mujer de los hijos de los profetas se acerco a Eliseo diciendo que su esposo había muerto y los acreedores venían a cobrarse las deudas llevándose a sus dos hijos.
El varón de Dios le pregunto que había en su casa y esta respondió según nos narra 2 Reyes 4:1-3 que solo un poco de aceite, y eso fue más que suficiente para que ella y sus hijos pidieran vasijas prestadas y llenaran milagrosamente hasta la última vasija prestada con aceite, esto sirvió para que vendiera el aceite, pagara la deuda y viva ella y sus hijos sin temor a pérdida.
Mi pregunta para ti en este momento es, ¿qué es lo que hay en tu vida, en tu casa? Aunque parezca insignificante, Dios puede hacer de esa nada mucho como para poder salir de lo que el enemigo hoy día quiere afligirte y detenerte en este problema que te aqueja.
No intentes volverte atrás, avanza hacia las promesas que Dios tiene para tu vida, porque El Señor irá a tu lado abriendo camino.
Bendiciones!!